LA HABANA, Cuba, septiembre, Gladys Linares- www.cubanet.org – Este 8 de septiembre se celebra el 401 aniversario del hallazgo en la Bahía de Nipe, de la bendita imagen de la Virgen de la Caridad, la Patrona de Cuba, identificada con la orisha Oshún, en el sincretismo afrocuano.
A escondidas o abiertamente, la Virgen de la Caridad está en el corazón del pueblo cubano.
Junto con el Día de San Lázaro, es esta una de las fechas que siempre se ha celebrado en los hogares cubanos, incluso a escondidas, durante muchos años después de 1959. Desde la víspera se reúne la familia cubana alrededor de los altares de la imagen que permaneció oculta durante años, para compartir dulces y bebidas con los seres queridos.
Los habaneros acuden a la iglesia de nuestra señora de la Caridad, ubicada en la calle Salud, de Centro Habana, o a otras donde se encuentre su imagen. Le llevan flores, le encienden velas y le piden protección para ellos y su familia. Muchos creyentes, antes de iniciar un viaje por mar, pasan por el altar para encomendarse a ella, como lo hicieron en épocas pasadas nuestros mambises. Es por eso que también se le llama la Virgen Mambisa, porque según cuenta la historia, los insurrectos llevaban su imagen en medallas y estampas, e incluso, cuando en secreto entraban a las ciudades, iban furtivamente a la iglesia para rezarle a la Virgen. Entre ellos Antonio Maceo.
Muchos, como Luisa, una vecina mía que venera a Oshún, también ponen en el altar cinco panetelitas o cinco merenguitos y le encienden dos velas. Dice que como no hay colorantes para teñir los dulces de color amarillo, usan polvo de bijol. Pero este año, como se dificulta la compra de huevos, no ha podido encontrar y eso la tiene preocupada. Ella exclama que sería una pena no ponerle nada, ahora que su madrina le hizo a la Virgen un vestido amarillo muy bonito.
Por estos días los medios de prensa han convocado a distintas actividades a favor de los cuatro espías, presos en Estados Unidos, para lo cual han adoptado el emblema de una cinta amarilla. Una devota de la Virgen, que visitaba a una amiga, comentaba indignada: ¨Yo que todos los años uso una cinta amarilla el Día de la Caridad, este año voy a tener que buscarme otra prenta, porque no quiero que me vayan a tomar por partidaria de los Cinco¨. A lo que mi vecina agregó: ¨No dudes tú que ese invento lo hayan hecho con doble intención, para aparentar seguidores, porque no me creo ese cuento de que están copiando una costumbre americana¨.